En función de cuál sea la procedencia del néctar empleado en la elaboración de la miel, podemos encontrar numerosas variedades de mieles distintas. Así, encontramos la miel de azahar, de romero, de eucalipto, de acacia, etc. Cada una de ellas, con unas propiedades y beneficios diferentes; así como con un sabor y textura propios.
A continuación, te mostramos todo lo que necesitas saber sobre la miel de azahar, un endulzante natural con un aroma muy intenso y que cuenta con numerosas propiedades y beneficios.
Características de la miel de azahar
La miel de Azahar es aquella elaborada principalmente a partir del néctar de árboles cítricos como el naranjo y el limonero. Se trata de una miel muy aromática y suave, con un alto componente cítrico que le aporta un gran carácter. También podemos encontrarla como miel de naranjo, de pomelo, de mandarina, de clementina o de limón.
Al ser extraída, esta miel es de un color ámbar claro, aunque a medida que se va cristalizando, su color se va aclarando hasta ser de un color blanco amarillento. Por su parte, su aroma es suave y característico, con un regusto ácido que le otorga equilibrio.
Propiedades de la miel de Azahar
La miel de azahar tiene múltiples propiedades específicas que la diferencian de otras mieles. Concretamente, es rica en antranilato de metilo, un componente único de la flor de azahar, y que le otorga un sabor y aroma únicos a la miel.
Asimismo, la miel de azahar constituye una gran fuente de energía, ya que es rica en minerales como el potasio, la fructosa o la glucosa, favorecen que en muchas ocasiones esta sea empleada como sustituta natural del azúcar.
Beneficios de la miel de azahar
Gracias a sus propiedades antisépticas, esta miel ayuda a fortalecer el sistema inmunológico.
- Tranquilizante natural: Su consumo es recomendado en personas nerviosas, ya que entre los beneficios de la flor de azahar destaca sus efectos sedantes. Por ello, suele ser empleada ante situaciones de estrés o ansiedad.
- Gran efecto antioxidante: A través del consumo de miel de azahar, contribuimos a proteger nuestro organismo contra el daño de los radicales libres. Asimismo, su uso habitual contribuye a disminuir el riesgo de padecer enfermedades crónicas.
- Previene los resfriados: Un vaso de leche con una cucharadita de miel de azahar ayuda a combatir la tos, prevenir los resfriados y suavizar la irritación de garganta.
- Cicatrizar heridas y quemaduras: gracias a sus propiedades antimicrobianas y antisépticas, es empleada directamente sobre las heridas y quemaduras para favorecer su cicatrización.
- Protege a los estómagos delicados: Lo cierto es que se trata de un antiespasmódico natural que no irrita las mucosas del estómago.
- Actúa contra los calambres: La miel de azahar puede emplearse tras una rutina de ejercicio para relajar los músculos tensionados.
- Favorece el sueño: Se recomienda tomar dos cucharadas de miel de azahar antes de dormir para favorecer así la conciliación del sueño.
Dónde se produce
La producción de esta miel es muy abundante en España; aunque predomina principalmente en regiones mediterráneas, donde abundan árboles cítricos como el naranjo o el limonero.
La temporada de producción se da principalmente en primavera, ya que es cuando se produce la floración de las flores y las abejas liban su néctar.
Sin embargo, es cierto que existen determinadas regiones donde se produce una segunda floración en otoño, entre los meses de septiembre y octubre; aunque por lo general la floración de primavera tiene un mayor grosor.
La flor de Azahar
El azahar, es la flor propia de algunos árboles frutales, como el naranjo, el limonero o el mandarino. Se trata de una flor blanca muy llamativa, que cuenta con un aroma intenso y agradable.
Además, dependiendo de cuál sea su procedencia, podemos encontrar flores de azahar dulces o amargas. Así, la variedad dulce podemos encontrarla en numerosos puntos de España, China o en Pakistán.
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