El invierno de 2018–2019 comenzará el 21 de diciembre a las 23h 23m hora oficial peninsular. Esta estación durará 88 días y 23 horas, y terminará el 20 de marzo de 2019 con el comienzo de la primavera. el día de menor duración.
Hoy día 21 es el día de menor duración. En el día del solsticio de invierno tiene lugar la noche boreal más larga.
Las colmenas en invierno
Las colmenas pronto formarán un ‘racimo’ de protección térmica para cuidar de la reina y sus crías (en el Hemisferio norte).
Para mantener la temperatura necesaria, las abejas del interior del racimo generan calor. Con el objetivo de que la temperatura en ese punto sea de entre 25 y 35 grados. Por su parte, las abejas de la superficie hacen una capa aislante de entre 2,5 y 7,5 cm, manteniéndose a una temperatura de entre 6 y 9 grados.
Pero por debajo de los 6 grados, estas abejas de la periferia morirían. Por ello, cada cierto tiempo se produce un cambio de turno entre las más adultas. En la periferia siempre estarán las abejas más mayores, muchas de las cuales morirán por mantener a las otras calientes.
El invierno y la miel
La miel recolectada antes de la entrada del invierno es un alimento especial para los cuidados del ser humano. Sus grandes propiedades nos protegen de muchas enfermedades producidas por el frío y el tiempo desapacible.
Desde las civilizaciones más antiguas hasta nuestros días, la miel se ha considerado por el hombre como uno de los placeres más divinos de la naturaleza. Así que para los griegos la miel era un manjar sagrado del que sólo disfrutaban los más ricos y afortunados. Los egipcios tenían gran aprecio a la miel. Pedían introducir una vasija en sus sarcófagos antes de morir. Tenían miedo a que en el más allá no pudiesen disfrutar de tan exquisito alimento. Incluso los mayas la utilizaban como tributo a los dioses.
Maes Honey y la miel
El amor, la pasión y el reto por elaborar una miel exquisita han logrado, con el paso del tiempo y la experiencia, que MAES HONEY tenga una gama única e impecable de gran variedad de mieles. Su larga tradición en el mundo de la apicultura se remonta a un tiempo pasado en el que la artesanía y el mimo a la miel se convirtieron en sus pilares fundamentales. Dos condiciones que hoy siguen muy presentes en su filosofía de elaboración, unidas además a la innovación y las ganas de superación.